Tras las entradas dedicadas a las calles Brasil y Montevideo, vamos a conocer ahora la serie de edificios, a juicio del Ayuntamiento de Sevilla, protegidos en la calle Porvenir.
Es pues éste la tercera entrada dedicada al barrio sevillano del Porvenir y en este caso a la calle de idéntico nombre que el barrio. Veremos edificios de Gutiérrez Moreno; de Balbuena y Huertas; López Carmona: Espiau y Muñoz; Talavera; Díaz Langas; Bringas Vega y Aníbal González.
Nos detenemos en primer lugar en un lugar adecuado para los amantes del buen yantar y beber: la célebre Casa Palacio de Porvenir 4. No está documentado quién proyectó el edificio, sí que Talavera y Heredia lo reformó en 1.931.
En el número 5, de 1.939, este inmueble de Gutiérrez Moreno:
A continuación, tres unifamiliares de Balbuena y Huertas, en los números 6, 8 y 10, inmuebles de 1.921. Recordamos que la obra más conocida de este arquitecto es el edificio Laredo :
Y otro más en el número 12, haciendo esquina con la calle Gaspar Alonso es un inmueble de 1.919 muy reformado:
En el número 7, otro unifamiliar de Gutiérrez Moreno, del año 1.919 y como el último citado, también muy reformado:
Otro Gutiérrez Moreno más, en el número 17:
El número 18 de la calle acoge este hermoso edificio de Espiau y Muñoz de 1.915, que fue con anterioridad fue sede de la Agencia de la Defensa de la Competencia de Andalucía
También proyectó Espiau y Muñoz los inmuebles de los números 19...
Y 20 y 22:
De Talavera y Heredia, es Villa Lola, en Porvenir 21:
En los números 25 y 27 de la calle se levanta la antigua fábrica Corominas, que proyectó Aníbal González en 1.917. En la actualidad el edificio pertenece a la Universidad de Sevilla:
El arquitecto cántabro Bringas Vega es el responsable de este edificio plurifamiliar del número 29 de la calle, que se edificó en 1.939:
Por último, en 1.945, Díaz Langa construyó los unifamiliares de los números 64 y 66. Se aprecia claramente como la construcción ya no responde a los esquemas regionalistas:
Me parece un reportaje ejemplar, no solo a nivel de arquitectura de esos años, sino social y humano como recuerdo de lo que fue "vivir" en ese barrio. La imaginación vuela y se recrea con esa vida real que tuvo que existir en esas calles residenciales al lado de un cuartel de Ingenieros y de un Parque que era lo "más" que se podía soñar y disfrutar. Estupendo vuelvo a repetir el estudio de esas calles del Barrio del Polvenir. Gracias.
ResponderEliminarMuchas gracias
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